El experimento de Pasteur es uno de los más importantes en la historia de la ciencia, ya que demostró de manera concluyente que la teoría de la generación espontánea era errónea. Este experimento tiene implicaciones importantes tanto para la ciencia como para la religión.
En la religión, por ejemplo, muchas personas creen que Dios creó el universo y todos los seres vivos en él. Sin embargo, si la teoría de la generación espontánea fuera cierta, esto significaría que los seres vivos pueden surgir espontáneamente, sin intervención divina.